A dos años de la muerte del Padre José Luis Ysern, Facultad de Educación y Humanidades UBB releva su legado
“Nos preguntan ¿qué ha sido la misión para ti? Para mí es la vida, es lo que ha dado el sentido a la vida, grabo esto en Semana Santa, quiero imaginarme que sea en mi realidad este signo de Jesús de rodillas lavando los pies a sus discípulos. Esta es la misión, estar de rodillas, estar inclinado a los pies de todos para servir a todos, especialmente a los más pobres y lograr un mundo más parecido al reino que Jesús nos enseña”, sostiene el Padre José Luis Ysern en uno de los registros audiovisuales que se preservan de él.
El pasado 15 de agosto se cumplen 2 años desde la muerte, a la edad de 86 años, de uno de los fundadores de la carrera de Psicología de la Universidad del Bío-Bío, de la cual fue el primer director el año 2006. De origen español y nacionalizado chileno a inicios de la década del ’70, el Dr. en Psicología José Luis Ysern de Arce se desempeñó como docente en el Departamento de Ciencias Sociales de la Facultad de Educación y Humanidades durante varios años formando a muchas generaciones con su sello enfocado en lo humano y social.
La Coordinadora del Centro Psicosocial José Luis Ysern de Arce de la Universidad del Bío-Bío, Ana María Retes, explica que “el Padre José Luis Ysern viene por una misión sacerdotal a Sudamérica y llega a Chile en un período muy complejo y se da cuenta que este es un país con desigualdades, injusticias y temas políticos muy importantes, y él tenía una misión de servicio muy importante, tenía una vocación por ayudar a la comunidad y sintió que aquí llegó al lugar perfecto, porque Chile era una sociedad que tenía tantas necesidades, tantos conflictos valóricos, políticos, que él decidió quedarse aquí porque se enamoró de la gente y sintió que habían tantas necesidades que se cumplía su misión de vida”.
El sacerdote ha sido reconocido por su ferviente promoción de los Derechos Humanos y el trabajo realizado con familiares de Detenidos Desaparecidos durante la Dictadura Militar en nuestro país. Actualmente el Instituto Nacional de Derechos, INDH, se encuentra en proceso de recopilación de antecedentes para relevar su aporte a la sociedad durante este período. Sin embargo, no sólo es reconocido por su trabajo en este ámbito, sino que por permanentemente contribuir a quienes más lo necesitaban.
“También trabajó con otros grupos altamente vulnerables. A pesar de que antes no era tan masivo como ahora el tema de la migración de nuestros hermanos extranjeros, en su momento él fue muy tajante de apoyar estos grupos por las necesidades con las que venían, de empezar a instalar una cultura del respecto y la diversidad. Cuando aquí en Chile no se podía hablar de aborto, cuando no se podía hablar de la comunidad LGBTQ+ él siendo sacerdote, cuando todos esperaban que su postura fuera tradicional, su discurso siempre fue de amor y de respeto”, añade Ana María Reyes.
De igual forma recuerda: “una vez tuvo que cerrar su Facebook porque en esa época, en ese Chile intolerante, cuando era complejo, cuando no se podía hacer esa defensa, sobre todo para ciertos sectores que esperaban que un cura ortodoxo defendiera la moral y las buenas costumbres desde el punto de vista de ellos, él sacó un artículo sobre la homosexualidad apoyando y parando la discriminación, y cuando él lo escribe tuvo un montón de comentarios de gente en contra y a él no le importó”.
La Escuela de Psicología de la Universidad del Bío-Bío tiene una fuerte identidad sustentada en un sello psicosocial y el servicio hacia la comunidad. A la fecha, muchos son los gratos recuerdos que tanto académicas/os y estudiantes de la carrera mantienen del “padre curita” como algunas/os le decían, así como las múltiples personas a las que ayudó.
Como anécdota, Ana María cuenta que después de la muerte del Padre José Luis Ysern “la gente venía a buscarlo aquí al Centro Psicosocial, gente que no se enteró de que él falleció, venían con sus boletas de la luz y el agua. Cuando les decíamos que él había fallecido se ponían a llorar y nos decían que él siempre los ayudaba a pagar las cuentas. Con los alumnos también hay infinitos testimonios de carreras que él pagó, matrículas, cheques. Él tenía un tema de desprenderse y ayudar”.
A dos años de su muerte, desde la Facultad de Educación y Humanidades de la Universidad del Bío-Bío se reconoce su legado e historia.
Biografía
José Luis Ysern de Arce nació en Valencia (España) el 6 de octubre de 1934. Fue el último de seis hijos del matrimonio de Vicente Ysern y María Josefa de Arce.
Licenciado en Teología, Diplomado en Psicología Clínica, Máster y Doctor en Psicología, en 1972 se incorporó a la sede Ñuble de la Universidad de Chile, institución antecesora de la actual Universidad del Bío-Bío. Se desempeñó como docente jornada completa en el Departamento de Ciencias Sociales de la Facultad de Educación y Humanidades, alcanzando la jerarquía de Profesor Emérito.
En época de la Dictadura Militar se desempeñó como capellán de la cárcel de Chillán y colaboró en la Vicaría de la Solidaridad. Ahí conoció el dolor de las mujeres que perdieron a sus familiares en el puente El Ala tras la aparición de algunos cuerpos en el lecho del río, a quienes acompañó durante los últimos años. A comienzos de la década de los años ’70, el Estado de Chile le otorgó la nacionalidad chilena.
El año 2006 fue nombrado director de la naciente Escuela de Psicología UBB. El año 2013 fue investido como Profesor Emérito de la Universidad del Bío-Bío. Paralelamente, ejerció diversas funciones pastorales en el obispado e instituciones de la Iglesia Católica de Chillán.
El profesor José Luis Ysern de Arce destacó por su compromiso con la juventud y los trabajadores, con los movimientos sociales y la defensa de los Derechos Humanos en las más duras circunstancias vividas en la región.
Defensor de la Psicología de la Liberación de Ignacio Martín-Baró y de la Pedagogía de la Esperanza de Paulo Freire, destacó en los círculos académicos por su incansable sello psicosocial, enfatizando en la formación de profesionales críticos que realicen aporte significativo a las personas que lo necesitan.
Las últimas labores de Ysern fueron relacionadas a actividades comunitarias en el Centro Psicosocial, como sacerdote en la Catedral de Chillán y la Capilla Espíritu Santo de la Parroquia El Buen Pastor de la Villa Los Volcanes de Chillán. Falleció en la madrugada del 15 de agosto de 2021 en la ciudad de Chillán, sus retos fueron sepultados en el Cementerio Municipal de la misma ciudad.
Fuente: CEPSICO.